The Unmade Bed (1957)

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Imogen Cunningham (1883-1976) fue una fotógrafa estadounidense, una de las fundadoras del influyente grupo f/64. Su trabajo no se puede encasillar dentro de un solo género, ya que trabajó exitosamente con varios. No obstante, sus trabajos más admirados están dentro de los géneros de desnudos y de naturaleza muerta. Dentro de los reconocimientos formales que recibió en vida está la Beca Guggenheim en 1970, mientras que dentro de los informales o no oficiales está el ser una de las fotógrafas más importantes de la historia con una de las carreras más longevas en el medio (unos 75 años*). Esta longevidad le permitió conocer a varias de las figuras más importantes de la fotografía del siglo XX, como Alvin Langdon Coburn, Lisette Model, August Sander, Paul Strand, Man Ray, Alfred Stieglitz, Brassaï, Gertrude Käsebier y, obviamente, a los miembros de f/64 Ansel Adams y Edward Weston.

*Cunningham tuvo la suerte de haberse iniciado en la fotografía a una temprana edad, contrario a Julia Margaret Cameron y Käsebier, quienes prácticamente debieron terminar de criar a sus hijos antes de tener la posibilidad de dedicarse a la fotografía. Sin embargo, Cunningham tuvo tres hijos (el primero cuando tenía 32 años) y, a pesar de esto, nunca dejó de fotografiar.  

Autorretrato en 1933

BREVE BIOGRAFÍA

Cunningham supo, desde pequeña, que deseaba ser fotógrafa. Cuando comentó esto a uno de sus profesores, éste le aconsejó estudiar química, lo cual realizó (de hecho, su tesis se enfocó en procesos fotográficos). En su primer año de universidad (1905-1906) compró su primera cámara, pero no es sino en 1907, después de apreciar el trabajo de Gertrude Käsebier, que Cunningham decide dedicarse a la fotografía de manera formal. Ese mismo año comienza a trabajar como asistente del fotógrafo Edward Curtis, y dos años más tarde, gana una beca para estudiar química fotográfica en Alemania. De regreso en Estados Unidos abre un estudio fotográfico y es así como comienza su carrera como fotógrafa. [1]

RECONOCIMIENTO

Aunque su talento siempre fue su carta de presentación y la razón por la cual obtuvo el respeto y reconocimiento de fotógrafos y críticos, hay dos sucesos puntuales que ayudaron a engrandecer su perfil. El primero fue la inclusión de su trabajo en la influyente y cosmopolita exposición Film und Foto en 1929, realizada en Stuttgart. Esta oportunidad se dio gracias a su amistad con Edward Weston. [2] El segundo fue su estatus de fundadora del famoso grupo f/64 en 1932, cuyo propósito era producir fotografías puras y sin manipulación que utilizaran todas las capacidades técnicas de la cámara, debían ser impresas por contacto, sin ampliar y sin retocar, en papel brillante. Cabe mencionar que alrededor de esta misma época, Cunningham no solo realizaba imágenes con dobles exposiciones, sino también experimentaba con otras técnicas de cuarto oscuro, algo que probablemente salía de la línea que el grupo perseguía. [1]

LA FOTOGRAFÍA

La idea de esta imagen surgió nada más y nada menos que de Dorothea Lange. Tanto ella como Cunningham eran catedráticas en el San Francisco Art Institute, y en 1957 Lange imparte un seminario cuyo propósito era “evocar en cada estudiante una interpretación completamente personal (simbólica o realista) del tema ‘¿Dónde vivo?’” Con este ejercicio, Lange esperaba que los estudiantes dirigieran la mirada hacia adentro, y no hacia afuera como se suele hacer. Sugirió que tomaran imágenes sin gente que pudiesen tener algún significado especial y personal y brindó varios ejemplos: una cama sin hacer, utensilios en el lavabo, un tramo de escaleras, una puerta viendo hacia afuera o hacia adentro. A los estudiantes les pareció una tarea muy extraña, y uno de ellos habló con Cunningham para expresar este desconcierto y también para quejarse del hecho de que debían realizar una fotografía significativa sin gente, mencionando el ejemplo de la cama. Es así como Cunningham despierta una mañana, realiza la fotografía y envía una hoja de contactos directamente a Lange. [3] Fue hecha más como broma, pero esta fotografía se ha vuelto una de sus más reconocibles.

 

Fuentes

[1] Lorenz, R., y Cunningham, I. (2000). Imogen Cunningham. Ideas without end. San Francisco, CA: Chronicle Books


[2] Alinder, M. S. (2014). Group f.64: Edward Weston, Ansel Adams, Imogen Cunningham, and the community of artists who revolutionized American photography. Nueva York, NY: Bloomsbury Publishing


[3] Meltzer, M. (1978). Dorothea Lange: a photographer´s life. Nueva York, NY: Farrar Straus Giroux

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