La sincronización del flash se puede referir a dos conceptos distintos. El primero está íntimamente relacionado con la velocidad y tipo de obturador que posea nuestra cámara. El segundo aplica únicamente cuando estamos fotografiando con velocidades relativamente lentas, y tiene que ver con el momento en el cual el flash va a dispararse (ya sea al inicio o al final de la exposición). En esta entrada exploraremos la sincronización vista desde el primer concepto.
VELOCIDAD DE SINCRONIZACIÓN
Esta se refiere a la velocidad más rápida en la cual el 100% del sensor o película estarán expuestos a la luz. Las cámaras digitales poseen mecanismos que evitan que el flash pueda disparar a velocidades que no cumplen con este criterio. Para corroborarlo, hagan la siguiente prueba con su cámara digital: en modo Manual, escojan cualquier velocidad arriba de 1/500. Después de haber hecho esto, activen el flash incorporado. ¿Qué pasó? Su cámara se revierte automáticamente a la velocidad de sincronización (puede ser 1/250, 1/200 o menos). Es por esta razón que un flash “normal” no podrá sincronizarse con la cámara si ésta utiliza velocidades muy rápidas. ¿Por qué sucede esto?
OBTURADORES
La mayoría de cámaras de lentes intercambiables utilizan un obturador de plano focal. Este tipo de obturadores funcionan a través de dos cortinillas que se disparan en sucesión para exponer el sensor a la luz. Si la velocidad es muy lenta (imaginemos una exposición de 5 segundos), la primera cortinilla se activará, dejando al sensor expuesto durante aproximadamente 4.9 segundos antes de que la segunda cortinilla se accione y concluya la exposición. Sin embargo, si utilizamos velocidades rápidas, las cortinillas se accionan casi al mismo tiempo, exponiendo al sensor a través de una franja.
El flash solo puede disparar cuando el 100% del sensor se encuentra expuesto a la luz, y esto solo se puede dar en velocidades lentas hasta llegar a la velocidad más rápida en la cual esta condición se cumple (de 1/200 a 1/250 en cámaras digitales, 1/60-1/250 en cámaras de película).
Como se ve claramente en la imagen de la derecha, en velocidades rápidas no hay un solo momento en el cual todo el sensor se encuentre expuesto, por lo que la sincronización de flash es imposible*.
*Algunas cámaras y flashes poseen un modo (HSS por sus siglas en inglés) en el cual pueden sincronizarse a velocidades más rápidas. No obstante, esto lo logran con una serie de flashazos durante la exposición y, aunque no lo podamos detectar con nuestros ojos, el flash esencialmente se vuelve una fuente de luz continua.
Disparo de flash(es) en modo HSS
Por otro lado tenemos a los obturadores centrales, los cuales encontramos en cámaras de formato medio, formato grande y telemétricas de 35 mm. Estos se asemejan mucho a la apertura de cualquier lente. Su mecanismo y diseño permiten la sincronización del flash a cualquier velocidad, ya que independientemente de ella, el obturador siempre dejará expuesto al 100% a la película o sensor.