BREVE BIOGRAFÍA
A la edad de 15, y ya con cierta experiencia en la fotografía, Coburn encontró en F. Holland Day (un primo lejano) a un mentor que no solo lo llevó a exponer sus fotografías en exposiciones importantes, sino también a conocer a los principales fotógrafos de la época, incluyendo a Edward Steichen, Frederich H. Evans y Robert Demachy entre otros. En 1902, con apenas 20 años, abre su estudio fotográfico en Nueva York, donde también conoce a Alfred Stieglitz (quien publicó su trabajo en Camera Work) y a Gertrude Käsebier, a quien asiste en su propio estudio fotográfico. [1] Aunque durante gran parte de su carrera estuvo asociado con el pictorialismo, siempre demostró un interés en la experimentación y en la abstracción. En un artículo escrito en 1916 sobre el futuro del pictorialismo, Coburn insta a sus colegas a ver hacia el futuro y a no seguir haciendo lo mismo, a experimentar, a hacer “…algo escandalosamente malo si quieres, pero que se vea novedoso.”, abogando por una fotografía abstracta incluso.
Ese mismo año conoce a Ezra Pound a Wyndham Lewis, quienes lo introducen al Vorticismo, [1] una corriente artística que buscaba encontrar arte y expresión en la abstracción. Coburn realizaría, durante un breve período de tiempo en 1917, experimentos fotográficos que Pound llamaría “vortografías”*, y las cuales son consideradas como las primeras fotografías completamente abstractas en la historia.
LA FOTOGRAFÍA
Inspirado por un viaje al Gran Cañón y al parque Yosemite desde donde tomó vistas aéreas del paisaje, Coburn realizó una serie de fotografías de Nueva York desde las alturas***. [3] Antes de ello, también había fotografiado escenas neoyorkinas desde el suelo, como la siguiente fotografía del edificio desde el cual tomó la fotografía destacada de la entrada:***De hecho, las expuso juntas en Londres en 1913. [3]
Como mencioné anteriormente, Coburn estuvo asociado con el pictorialismo, pero en esta fotografía da un paso más allá de él realizando, de manera deliberada, una composición que se acerca más a lo abstracto que a lo figurativo tanto en lo visual como en lo conceptual, incluyendo al título. Muchos conocedores de arte y de fotografía la consideran como la primera en crear una abstracción citadina desde las alturas, volviendo a Coburn en un pionero fotográfico en al menos dos áreas distintas.
El propio Coburn habló de esta fotografía, diciendo que es “… una composición o ejercicio para llenar un espacio rectangular con curvas y masas” y la consideraba “… revolucionaria, ya que depende más del patrón que del tema.” [4] Hoy en día estamos acostumbrados a este tipo de fotografía, pero en su época este enfoque era algo totalmente novedoso y vanguardista.
En cuanto a ubicación, la fotografía fue tomada desde la Metropolitan Life Tower, viendo hacia el parque Madison Square.
En cuanto a equipo, la imagen fue tomada con una Shew Delta Reflex y un lente telefoto [4] (la imagen fue tomada desde lo más alto del edificio, pero pareciera que fue tomada desde algún piso no tan alto).
La fotografía precede por 16 años a las que Lázsló Moholy-Nagy tomó desde las alturas en Berlín, las cuales incluyó como ejemplo de una “nueva visión” que revolucionó a la fotografía e influyó e inspiró nuevas formas de ver y de fotografiar.
Fuentes
[1] Warren, L. (2006). Encyclopedia of twentieth-century photography. Nueva York: Routledge
[2] Pound, E. (2011). Pavannes and Divisions. Nueva York, NY: Barnes & Noble
[3] Wigoder, M. (2002). The “Solar Eye” of Vision: Emergence of the Skyscraper-Viewer in the Discourse on Heights in New York City, 1890-1920. Journal of the Society of Architectural Historians, 61(2): 152–169
[4] Branchini, V. (2009). The Photographs of Alvin Langdon Coburn at George Eastman House. A Characterization Study of Materials and Techniques. George Eastman House