Paz Errázuriz (1944- ) es una fotógrafa chilena que comenzó a fotografiar durante la dictadura de Augusto Pinochet en los años 70, lo cual muestra el grado de dificultad con el cual tuvo que trabajar durante más de una década y la valentía con la cual fotografiaba, ya que sus retratos eran un acto desafiante hacia el régimen militar. Al igual que Manuel Álvarez Bravo y Graciela Iturbide, fue galardonada con una Beca Guggenheim en 1986, siendo de hecho la primer fotógrafa latinoamericana en recibirla (dos años antes que Iturbide).
Su fotografía es serial y documental. Su preocupación por lo tanto no radica en lo estético, sino en que su voz (y principalmente la de sus sujetos) sea escuchada y reconocida. Los temas que aborda suelen ser incómodos, pero no necesariamente por lo que muestran o representan, sino porque nos confrontan ante nuestros propios prejuicios y nuestra propia indiferencia.
Aunque su principal cuerpo de trabajo lo realizó en Chile, los temas que aborda y los comentarios que hace sobre ellos pueden ser comprendidos fácilmente en otros lugares de Iberoamérica. En el caso de Guatemala, no sería difícil engañar a algunos paisanos mostrándoles las fotografías y declarando que fueron tomadas en nuestro país. En ellas veríamos protestas y manifestaciones públicas frente a un gobierno opresor, la vida cotidiana de prostitutas y trasvestis en áreas marginales y el diario vivir de los artistas circenses y su trabajo en sus circos ambulantes.
El objetivo principal de esta serie de fotografía iberoamericana es destacar imágenes individuales, pero para esta entrada la selección se dificulta muchísimo, ya que el trabajo de Errázuriz se comprende y aprecia de mejor manera observando sus series completas. Sin embargo, en esta entrada escogí esta imagen porque por un lado quería mostrar una parte más ligera de su trabajo, y por otro siento que tiene un aire misterioso que puede ofrecer varias interpretaciones al espectador.
VÍNCULO CON GUATEMALA
Precisamente este año participó como expositora durante la 22 Bienal de Arte Paiz, donde mostró una retrospectiva de su trabajo. Además de eso, también expuso (probablemente por primera vez) dos series que realizó en nuestro país: Sepur Zarco (2019) y Trans Guatemala (2019). En la primera, Errázuriz retrata a las llamadas “Abuelas de Sepur Zarco”, ancianas de la comunidad Q’eqchi’ sobrevivientes de crímenes despreciables a manos de soldados del ejército de Guatemala durante el conflicto armado interno. Sus casos llegaron a los tribunales, culminando con la condena de dos ex militares y la concesión de medidas de reparación para ellas y sus comunidades. Este sitio contiene más información acerca del tema. La segunda serie, como el nombre sugiere, tiene como sujetos a miembros de la comunidad trans en Guatemala, un tema que Errázuriz documentó en su proyecto “La manzana de Adán” realizado en Chile en los años 80.
