Paul Strand (1890-1976) es uno de los tantos fotógrafos estadounidenses cuyo trabajo ha dejado un legado enorme en la historia del medio no solo por su trabajo fotográfico, sino por haberlo realizado en un momento en el cual la fotografía se legitimaba como arte, ayudando a que público y la crítica lo aceptasen.

BREVE BIOGRAFÍA
Strand recibió su primera cámara a la edad de 12 años (una Kodak Brownie), pero no fue sino hasta que recibió clases con un tal Lewis Hine que comenzó a tomar a la fotografía seriamente. Hine organizó un curso de fotografía extracurricular al cual se apuntaron Strand y otros cinco estudiantes. En él, no solo aprendieron los aspectos técnicos de la fotografía como el uso del flash y técnicas de cuarto oscuro, sino también la faceta de la fotografía como arte. Una de las actividades que Hine organizó fue una visita a la galería 291 de Alfred Stieglitz, donde conocieron el trabajo de los fotógrafos más importantes de la época, incluyendo a Julia Margaret Cameron, Gertrude Käsebier, Clarence White* y, por supuesto, del propio Stieglitz. [1]
*Strand incluso llegó a mostrar su trabajo a Käsebier y a White. No obstante, dijo que “No me ayudaron a desarrollarme [como fotógrafo]” [1]
A partir de ese momento, Strand supo que quería dedicarse a la fotografía. Periódicamente visitaba a Stieglitz para mostrarle su trabajo, y éste le daba consejos y dirección. Otra manera (indirecta) con la cual Stieglitz influenció al joven Strand fue, mostrando en su galería, el trabajo de grandes pintores europeos como Cézanne, Matisse, Picasso y Braque entre otros. Al respecto, comentó: “Al igual que los críticos de la época, estaba desconcertado por [estas pinturas]. Pero tenía el presentimiento de que algo muy importante estaba sucediendo, y quise aprender más acerca de ello.” Esto lo motivó a experimentar, enfocándose en formas y patrones más que en el estilo pictorialista que practicaba hasta ese momento. [1]
Ya en 1915, Strand vuelve a mostrar su trabajo a Stieglitz, y esta vez logró un impacto gigante en ambos: “… cuando mostré mi portafolio, [Stieglitz] estaba sorprendido. Recuerdo que llamó a Edward Steichen… para que llegara a verlo. También me dijo que, desde ese momento, debía pensar en [la galería] 291 como mi casa, y que llegara cuando quisiera… Fue un gran día para mí, igualando, en cierto modo, al día en que Hine nos llevó… [a ver] el trabajo de aquellos otros fotógrafos por primera vez.” [1] Stieglitz quedó tan impresionado con su trabajo que no solo le organizó una exposición en la galería, sino que también publicó su trabajo (incluyendo la fotografía destacada de esta entrada) en Camera Work 48, y dedicó los últimos números (49-50) exclusivamente a sus fotografías. [2] Además, le dedicó palabras muy halagadoras, como: “… sin lugar a dudas el único fotógrafo importante que ha emergido en este país desde [Alvin Langdon] Coburn. En mi opinión, su trabajo tiene más importancia que el de Coburn. Sus impresiones son más sutiles… y ha realmente agregado una visión original a la fotografía. No hay… trucos. Directa completamente, en visión, en trabajo y en sentimiento. Y original.” [3]
LA FOTOGRAFÍA
Originalmente intitulada “Pedestrians Raked by Morning Light in a Canyon of Commerce” [4] [5], esta fue una de las primeras imágenes que Strand tomó tras verse inspirado por el trabajo que presenció en las galerías de Stieglitz. Un concepto con el cual estaba experimentando en esa época era el capturar el movimiento de la ciudad: las personas, las calles, el tráfico. “Quería ver si podía organizar una fotografía con ese tipo de movimiento de una manera que fuera abstracta y controlada. Me percaté… de esas grandes ventanas oscuras del Edificio Morgan** en Wall Street. Estaba fascinado viendo a la gente caminar por esas ventanas enormes, rectangulares y bastante siniestras – formas ciegas en realidad porque era muy difícil ver hacia adentro – y un día llegué y me paré en las escalinatas del Edificio de la Subtesorería para realizar la fotografía e intentar juntar todo eso. No sé cómo lo logré, realmente. En ese tiempo, las emulsiones eran muy lentas, y seguramente no estaba fotografiando a más de 1/25.” [1] Como vemos, no fue una fotografía tan espontánea como se podría pensar inicialmente. En otra ocasión reiteró la intencionalidad detrás de la fotografía: “No fue sólo que yo estuviera vagando y haya visto algo así. Fui con una cámara para ver si podía captar el movimiento abstracto del contrapunto entre el desfile de esas grandes formas negras del edificio y toda esa gente apresurándose abajo.” [6]
**El edificio se encuentra en 23 Wall Street en el Distrito Financiero de Manhattan, justo en frente de la Bolsa de Valores de Nueva York.
Desde el punto de vista técnico, la fotografía la tomó con una cámara réflex Ensign de 3 ¼” x 4 ¼”. Y a pesar de que era conocido por supuestamente solo realizar hojas de contacto, admite que para ampliar esta fotografía tomó una serie de pasos extra. Primero, hacía una hoja de contacto pero en una placa de vidrio. Esta placa la proyectaba sobre otra placa de 11” x 14”, y de esta placa hacía otra hoja de contacto en un papel de platino. [1]

En 1917, la fotografía ganaría un primer premio (de $100)** en la exposición de fotografia “John Wanamaker” en Filadelfia. [7]
**Algo que hoy en día generaría una avalancha de críticas por conflictos de interés, ya que Steichen y el propio Stieglitz eran jueces. [7]
En 1921, Strand, junto a Charles Sheeler, grabarían un cortometraje vanguardista intitulado “Manhatta”, en el cual mostraban la vida en la ciudad de Nueva York. Como era de esperarse debido a la influencia de la imagen, Strand y Sheeler recrearían la fotografía, pero esta vez con movimiento.

Aunque fue realizada más que todo como un ejercicio estético, a la imagen se le ha adscrito un significado más allá del original no solo por lo que significa Wall Street, sino también por un atentado contra el edificio que se dio en 1920, y a partir del cual la lectura de la fotografía sufre un cambio.

Algunos críticos ven a la imagen como una representación de desigualdad o de la opresión que los bancos, el capitalismo y/o el propio Wall Street ejercen sobre la población. Algunos de ellos incluso afirman erróneamente que el propio Strand estaba expresando estos sentimientos en la fotografía. No obstante, Strand jamás estuvo preocupado por estos conceptos políticos o económicos al tomar la fotografía. Dijo que “… no sabía nada sobre cárteles, etc. Solo intentaba fotografiar la ‘urgencia de ir a trabajar’…”. [8]
Fuentes
[1] Tomkins, C. (Ed.). (2004). Paul Strand. Sixty years of photographs. Nueva York, NY: Aperture
[2] Newhall, N. (1945). Paul Strand. Photographs 1915-1945. Nueva York, NY: The Museum of Modern Art
[3] Morris, M. y Phillips, C. (1989). The New Vision. Photography between the World Wars. Nueva York, NY: The Metropolitan Museum of Art
[4] Williams, V. (2012). What makes great photography. Londres, Inglaterra: Apple Press
[5] The Jewish Museum (s. f.). Wall Street, New York. The Jewish Museum. Recuperado de: https://thejewishmuseum.org/collection/33896-wall-street-new-york
[6] Dick, S. J. (Ed.). (2009). Remembering the space age: Proceedings of the 50th anniversary conference. Washington, D.C.: U.S. Government Printing Office
[7] Alinder, M. (2014). Group f.64: Edward Weston, Ansel Adams, Imogen Cunningham, and the community of artists who revolutionized American photography. Nueva York, NY: Bloomsbury Publishing
[8] Trachtenberg, A. (Ed.). (2004). Paul Strand. Essays on his life and work. Nueva York, NY: Aperture